duelo de titanes!

Hablando de Reñaca, me acorde de la penultima vez que estuve alla. Fue para un congreso tambien, aunque entendi miolto.
En todo caso, sali con un puñado de amigos y la Denisse a Valparaiso, y pasamos al jotacruz. Estaba muerto. Realmente era fome, estaba lleno de cachureos y nadie mas que nosotros. Incluso los rayados de las paredes eran charchas: puros juramentos de paseos de curso(o gira de estudios pa los suiticos) y frases de Alejo y Valentina. O sea, efecto piojera : lugar de supuesta tradicion que ahora se llena de pendejos.
Asi que rumiaba con dificultad la chorrillana que nadaba en aceite, apaciblemente, hasta que llego El.
Apenas me acuerdo, pero tenia el tipico aspecto de poeta, y era lo que pretendia ser. Cobraba por ello.
Asi que se presento amablemente como un "loco", o "genio, de los pocos que quedan si es que no se suicidaba antes" (ahi ya me pateo) y nos leyo algunos versos. La sensacion que me quedo fue desagradable, como con la mayoria de la poesia prefabricada para fines nobles o la que se queja por la rutina.
Listo!, era cosa de esperar, decir que no teniamos plata y ponernos a conversar, hacer grata la noche e invitarlo, en el mejor de los casos. O simplemente esperar a que se fuera y reirnos un rato. Pero no! Se le ocurrio preguntar que estudiabamos. Y con la respuesta, le paso un nubarron por la cara.
Despues del caracho, nos mostro unos cuadros que habia pintado, y a cada rato nos preguntaba que veiamos aqui o alla, y que nos producia, y si podiamos explicarlo. Lamentablemente no se me ocurrio nada pesado para decirle, asi que fui respetuoso y le dije la verdad.
"Ahi hay un dinosaurio. Ahi hay dolor. Ese no me gusta. No entiendo. Ah, ese si. Se parece a un sueño que tuve..." y asi. Pero no pescaba. Estaba centrado en el saco de huevas #2 de esta noche (Adan se llama) que estaba dispuesto a seguirle el juego. Esperaba con ansias una respuesta del tipo "no puedo entender nada...mis ecuaciones no lo explican...que raro!", y mi compañero termino dandole en el gusto. Saco su pobre arsenal psicologico para burlarse de las manchas pseudofauvistas en nombre de la ciencia. Cada uno creia que tenia la razon, y al mismo tiempo estaba mordiendo el anzuelo del otro. Como mierda dos personas se pueden complacer tanto y desagradarse al mismo tiempo.

Al poeta le temblaba la voz eso si. Estaba convencido de que nos habian castrado o nos habian mostrado una flor con un ruido estridente cuando pendejos. Y el otro, para que decir. Es tan cliche la pose que no vale la pena.
Al final el #1 se fue mascullando no se que cosa sin escuchar una palabra de lo que yo intentaba decirle. Tan convencido como antes. Y el #2 siguio comiendo, y todo siguio igual de fome. Me quedo la impotencia nomas de haberle hablado a un muro, pero al fin y al cabo, no tenia por que sentirme mal. El empezo, y parece que lo que recogio esa noche le sirvio para seguir trabajando. Me tinca que lo necesitaba profundamente.